Una de las historias más notables acerca de los beneficios
de la correcta alimentación se encuentra (muchos no podrán creerlo) en la
Biblia: en el Antiguo Testamento se relata que Daniel y sus amigos
sobresalieron en la corte del rey Nabucodonosor ingiriendo una dieta a base de
legumbres que, además, fue su forma inicial de testificar a favor de su Dios.
Merling Alomía, autor de "Daniel, el Profeta
Mesiánico", afirma que cuando Daniel se refiere a legumbres es “todo el
amplio rango alimentario de origen vegetal encontrado en la naturaleza: frutas,
cereales, hortalizas, legumbres, nueces, palmeras, etc”. Sin embargo, Daniel no
estaba inventando esa receta, él hacía referencia a la dieta dada por Dios a
Adán y a Eva en Génesis 1:29 “Os doy toda planta que da semilla, que está sobre
la tierra, y todo árbol que lleva fruto y da semilla. Esto será vuestro
alimento”.